Descripción
El texto presenta tres diálogos agrupados por artículos de autores de la Universidad de Girona, Ginebra, Rovira i Virgili, y Colombia que forman equipo con educadores de distintas escuelas y niveles educativos El primer diálogo lo encabeza el título: Nuevos roles para los docentes en la investigación en didácticas. Este diálogo empieza con un estado de la cuestión de las didácticas a partir de los años 60 y plantea una necesidad de repensarlas en función de su autonomía, base científica y vinculación social. Se confrontan modelos y tendencias internacionales y se lanzan distintos interrogantes sobre el futuro docente e investigador de las didácticas.nSe inicia el segundo diálogo titulado Desde la formación de docentes: herramientas para la acción donde se presentan ejemplos de prácticas reflexivas, aportando nueva terminología así como recursos que se han experimentado en las escuelas de educación primaria. Se alude a las competencias del docente en la acción didáctica y en el juego como actividad reflexiva.nConceptos para repensar la acción docente en el aula, es el tercer dialogo que analiza el aula como espacio de la acción didáctica conjunta entre el docente y sus alumnos. Plantea la importancia de las acciones docentesde construcción del medio didáctico como terreno de los aprendizajes y de devolución de las actividades a los alumnos.nComo reflexión de fondo subyace el hecho de que ya entrados en la segunda década del siglo XXI, cabe preguntarse sobre la interdisciplinariedad y el rol de los docentes y su repercusión en todas las disciplinas. Una mirada retrospectiva nos da cuenta de que en la inmediata postguerra y hasta los años 1980 del siglo XX, el aula fue considerada esencialmente como un «terreno de aplicación» de los avances obtenidos en los campos académicos. Con el afianzamiento académico de las ciencias humanas y sociales comienzan a surgir, desde los años 80, paradigmas que permiten pensar de manera más compleja las relaciones entre teoría y práctica. Hasta llegar a la situación de considera la actividad docente cada vez más como un verdadero campo profesional en el que sus miembros no son únicamente ejecutores de un saber, sino productores de saberes expertos y actores de los procesos investigativos. nn