Descripción
La catedral románica de Barcelona, iniciada hacia 1037 y consagrada en 1058, fue sin duda una de las fábricas cardinales en la arquitectura catalana de mediados del siglo XI. Desgraciadamente, son muy limitados los conocimientos ciertos de los que disponemos en cuanto a su definición material. Con el ánimo de progresar sobre las propuestas de restitución avanzadas hasta la fecha, este volumen conjuga siete estudios que, a través del examen crítico de fuentes documentales, materiales y tecnológicas, ofrece nuevas y justificadas interpretaciones. Al tiempo que se desvela el conocimiento de la iglesia episcopal, se razona la vibrante vitalidad tanto de los protagonistas históricos como del tejido urbano, monumental y social que, de forma simbiótica, se organizó en torno a la catedral.
El puzzle histórico y artístico del período románico recibe ahora una pieza primordial.